La maternidad y la paternidad son dos experiencias maravillosas que transforman la vida de las personas, pero ¿cómo se ven estas experiencias desde el punto de vista social?

Tanto la maternidad y la paternidad transforman a las personas, de repente aparece un ser que hay que cuidar y proteger. Está demostrado que los cerebros de las madres se modifica por ejemplo; Ciertas áreas del cerebro, como la amígdala, el hipocampo y la corteza prefrontal, pueden experimentar cambios en el tamaño y la estructura durante el embarazo y la maternidad. Estas áreas están asociadas con funciones como la memoria, las emociones y la toma de decisiones, que son cruciales para el papel de la madre. Ya desde el embarazo con las hormonas como la oxitocina y los estrógenos, que están relacionadas con la vinculación y el comportamiento maternal influyen en la neuroplasticidad, la capacidad del cerebro para reorganizarse y adaptarse. Por lo tanto los estudios dicen que el cerebro de la mujer se va preparando para la maternidad. El del hombre también hay estudios de cambios una vez son padres como un incremento de oxcitocina que es la formación de vínculos afectivos y una disminución de la testosterona. Pero estos cambios son mucho más leves. Para la mujer primero pasa todo un embarazo de nueve meses, que es una montaña rusa de emociones, con altibajos que forman parte del viaje hacia la maternidad. Después la experiencia de un parto, con los dolores, la oxcitocina, las posibles dificultades que pueden ocurrir incluso los posibles peligros para la vida de ambos. Todo esto es un proceso que sumado con las hormonas, el puerperio hacen un mundo entero dificil para la mujer. No deja de ser también a la vez una experiencia única y bonita para la madre.

El puerperio implica cambios físicos y emocionales en el cuerpo de la mujer a medida que se recupera del embarazo y el parto.

Por lo tanto la transición entre mujer a madre es muy diferente que de hombre a padre. En ningún momento se expone que uno es mejor que otro, simplemente por biología son diferentes.

A partir de esta introducción se expone como la maternidad y paternidad son diferentes aunque ambos padres desempeñan un papel crucial en la crianza de los hijos.

El papel de la madre socialemente es mucho más exigente que la del padre. Se espera que las madres asuman la mayor parte de las responsabilidades en el cuidado de los hijos. Y en los hombres se enfrentan a presiones para ser el principal sostén económico.

Hay un estigma del trabajo y de la crianza en el ámbito social. Parece ser que a las mujeres se les exige que pronto se recuperen, el cuerpo y la salud, y esto en realidad tiene su proceso natural. Esta mal visto por la sociedad realmente todo lo que haga la madre, si quiere incorporarse a trabajar se la tacha de mala madre desnaturalizada que no atiende a las necesidades del hijo o hija. Si la madre prefiere quedarse con el cuidado de su hijo o hija también está mal visto y muchas personas pueden criticar por ser una mantenida. Si decide trabajar en jornadas partidas o reducidas, pues que no va a llegar a nada. Incluso las propias madres se sienten mal y culpables decidiendo cualquier opción de las tres.

A parte de todo esto, siempre se la va a criticar por: la alimentación de los hijos, por el tipo de crianza etc.

No paran en redes sociales en reels en atacar de forma constante a la crianza de los hijos, non paran de haver comentarios de ir juzgando a las madres. Por ejemplo, los videos tipicos de 5 tips para ser buena madre, 5 comidas sanas para los hijos, como educar a los hijos etc. Después están los videos de madres explicando las dificultades que pasan con sus hijos y siempre están los tipicos comentarios de que ¿para que los has tenido si te estás quejando? A ver la maternidad tiene de todo, y ¿que hay de malo en que una madre se desahogue aunque sea en redes sociales? La tachan de mala madre porque se comunica y expone que ser madre tiene de todos los colores.

Por lo tanto el perfil de una «buena madre» que dé el visto bueno en la sociedad sería:

1. Una madre tiene que recuperarse nada más nacer su hijo, por lo tanto tiene que dedicarse a su cuerpo yendo al gimnasio para volver a tener el abdomen plano, que no se le note que ha pasado por un embarazo.
2. Una madre debe atender las necesidades del bebé 24 horas 7 días sin quejarse ni aparentar cansancio. Puede recibir todas las visitas que estas quieran venir y siempre con buena cara.
3. Una madre debe alimentar a sus hijos de forma equilibrada siempre, no les debe proporcionar nunca azúcar ni alimentos procesados. Siempre debe cocinar de forma saludable. Las pizzas, los frankfurts, los nuggets congelados son un demonio.
4. La casa debe estar siempre impoluta, no pueden haber platos sucios en la cocina ni una montaña de ropa sucia, no puede haber ni una mota de polvo en los muebles.
5. Siempre hay que tratar los hijos con la crianza positiva, siempre hay que tener una sonrisa con ellos y estar siempre de buen humor, siempre hay que dedicarles todo el tiempo necesario para estimular su desarrollo y poder estar presente en todos los momentos del día. Para nada nos podemos separar de ellos y no se pueden tener un mal día, no existen los gritos, ni las ordenes. Todo tiene que ser pacífico y repleto de amor en las palabras de una madre.
6. Una madre también es mujer y debe «cumplir» todos los aspectos de una buena esposa.
7. Una madre no debe aburrir a sus amigas con comentarios de su vivencia con su maternidad.
8. Una madre debe anteponerse a sus deseos de querer ascender en el mundo laboral y de perseguir sus deseos de ascenso por el bien de sus hijos y por lo tanto quedarse a su cuidado.
9. Una madre no puede dejar de trabajar porque, no puede dejar de realizarse como persona, y no puede abandonar su trabajo que tanto le ha costado con todos los estudios que ha tenido que realizar.
10. Una madre siempre siempre debe alimentar a sus criaturas exclusivamente con lactancia materna hasta los 6 meses e incluso hasta al año.

La realidad es que:

1. Una madre necesita su tiempo para quen se recupere y a nadie le debe importar como tiene el abdomen.
2. La madre tiene derecho a decidir si vienen visitas, quien y cuando, y tiene todo el derecho de pedir ayuda si es necesario y poder explicar la situación que está viviendo.
3. A veces hay que recurrir a la comida chatarra o a comida fácil de hacer porqué es así, no hay que justificar el porqué. Y lo mismo con el azúcar pasa lo mismo.
4. Otra cosa importante, la casa y sus tareas pueden esperar. Hay que priorizar primero en uno mismo y su salud mental y física.
5. Hay días que serán más dificiles y se culmina la paciencia y al final una explota porqué ya no puedes más. Y no pasa nada por un dia pegar un grito, o no hablar de la mejor manera. Ya se harán las cosas mejor al día siguente. Aunque siempre la madre se le pega el sentimiento de culpa. Todo el mundo tiene derecho a tener un mal día, y si se necesita encerrarse en el baño unos minutos no va a pasar nada, o si se pide ayuda al padre tampoco va a pasar nada.
6. El cuerpo de una mujer tarda en recuperarse y lo mismo pasa en la vida sexual de la pareja. No se puede pretender que al segundo día ya volver a funcionar con normalidad. El hombre deberá apoyar a la madre y darle el tiempo que necesite, hablar las cosas y trabajar de forma empática.
7. Una madre necesita explicar y desahogarse con sus amistades de su maternidad y poder obtener lazos de comprensión con sus amigas.
8. A todo no se llega y es el momento en que hay que tomar una decisión o, se escoge volver al mundo laboral y entonces dejar en otras manos el cuidado de los hijos o por otro lado se escoge cuidar a los hijos. Ninguna elección es mala. Ambas son válidas.
9. La decisión que se tome siempre será respetada.
10. Una madre puede alimentar a su criatura con lactancia materna, artificial o mixta. Hay muchas situaciones hacen que una madre pueda optar por otro tipo de lactancia. Así que no hay que juzgar.

Y así se podrían exponer muchos más ejemplos.

No solo la sociedad pone el punto de mira de todas las acciones de la madre, también otras madres son las que critican. Todo esto sólo hace que la madre tenga mucho más peso en su espalda, con lo que «se debería hacer». El sentimiento de culpabilidad de las madres la mayor parte viene causado por estos dogmas sociales. En muchas ocasiones se siente una madre culpable por hacer lo que esté haciendo. Y lo que hay que decir: Madre, lo estás haciendo bien, hay que seguir con su instinto de madre.

Por otro lado los padres, y no hay que generalizar, pero normalmente cuando un padre participa en el grupo de padres del colegio, cuando por la calle pasea con sus hijos, cuando juega con ellos en el parque, o incluso cuando les cambian un pañal, socialmente está muy bien visto y se les llama padrazos. Es como que la implicación de los padres es algo nuevo, y digno de elogio.

Incluso en reuniones familiares cuando un padre se está ocupando del cambio de pañal o de alimentar a sus hijos los familiares se extrañan, incluso comentan que porqué no lo está haciendo la madre, o porqué la madre es tan floja que todo lo está haciendo el padre. Recordemos que la crianza es de los dos progenitores. No todo tiene que recaer en la madre.

No se pretende demonizar a los hombres ni victimizar a las mujeres. Simplemente esta sociedad cada día va cambiando y hay ir mejorando y intentar respetar las decisiones y mostrar más empatia y apoyar sin dañar a las personas con los juicios personales. Siempre es mejor sumar que restar, es decir es mejor mostrar apoyo y empatía que no juzgar a las personas sin conocimiento.ç